miércoles, 7 de enero de 2009

El Despertar.

Era una mañana hermosa, el cielo era màs claro que cualquier otro dìa, las nubes podian verse como algodones gigantes y los rayos de sol iluminaban de una forma muy especial. Ese dìa como todos los anteriores despertè con una sonrisa dibujada en mi rostro y agradecida por ver una vez màs la luz del sol; hasta ese momento se habìan presentado ante mi situaciones que creìa difìciles y que habìa podido superar, pero fue entonces que mi vida tuvo un giro y cambio de forma inesperada.


Aquel dìa descubrì una situaciòn muy difìcil que se habìa convertido en un reto que implicaba un desgaste fìsico y emocional y el cual tenia que afrontar con coraje; la situaciòn que habìa llegado a mi vida tenìa que ver con una enfermedad, una de tantas que van mermando la vida del ser humano; era una de esas enfermedades que se ven tan lejanas y que cuando menos lo esperas esta a tu lado y te llena de miedo e incertidumbre, en ese momento pude percatarme de que aquellas vivencias del pasado que hasta entonces habìa creìdo difìciles no habìan sido màs que pequeñìsimas piedras en el camino que me habìan servido como entrenamiento para poder saltar ahora el gran muro que estaba frente a mi; descubri que aquellas experiencias me habìan enseñado dos cosas importantes, la primera a sacar mi fortaleza y la segunda que al final del camino siempre hay algo bueno esperando por mi, y entonces supe que esta vez no seria la excepciòn.

Quizàs haya personas que renieguen por estar viviendo la misma situaciòn que yo pero sòlo espero que algùn dìa se den cuenta que este tipo de situaciones màs que un gran problema es una gran lecciòn que se convertirà en una hermosa experiencia de vida y por ello es que al contrario de aquellas personas yo doy gracias por estar navegando dentro de este barco, ya que durante este viaje he crecido como ser humano, me he dado cuenta de que estoy hecha y lo màs importante he aprendido a valorar todo lo que tengo a mi alrededor, desde lo màs grande hasta lo que puede parecer a vista de otros lo màs pequeño e insignificante.

Aùn no sè cuando terminara el viaje quizà en algunos meses o en años, quiza y cuando todo termine yo ya no pertenezca a este plano, aùn no sè lo que pueda pasar, asì como tampoco sè que tanto aprendì, estoy aprendiendo y aprenderè de todo esto, pero seguramente es màs de lo que puedo imaginar; de lo ùnico que estoy segura es que mientras esta situaciòn permanezca en mi camino la afrontare con mucha fe y amor, y finalmente saldrè victoriosa, con pequeños rasguños por lo vivido pero victoriosa y con la gran satisfacciòn de haber obtenido sabidurìa y una hermosa y gran riqueza espiritual.

Thank you Abba for being with me in this trip.

No hay comentarios:

Publicar un comentario